Gestapo. Estas tres sílabas hicieron temblar a Alemania y a Europa entera durante doce años. Nunca, en ninguna época y en ningún país, una organización tuvo tal poder, tal complejidad ni tal perfección en su eficacia del horror. En las páginas de este libro, Jacques Delarue ha desentrañado su mecanismo interno para mostrarnos cómo el régimen nazi sólo pudo imponerse gracias a este armazón.
Gestapo. Estas tres sílabas hicieron temblar a Alemania y a Europa entera durante doce años. Nunca, en ninguna época y en ningún país, una organización tuvo tal poder, tal complejidad ni tal perfección en su eficacia del horror. En las páginas de este libro, Jacques Delarue ha desentrañado su mecanismo interno para mostrarnos cómo el régimen nazi sólo pudo imponerse gracias a este armazón. A pesar de la abundante bibliografía existente sobre el nazismo, se conocen poco las biografías de los hombres que manejaron la Gestapo. En este libro son mostrados con sus vicios, debilidades y también cualidades. Su destino cambió el día que el hitlerismo les proporcionó una nueva «moral» que cambió su conciencia por una sumisión total al dogma nazi, lo que dio lugar al nacimiento de una banda por la fuerza bruta: desaparecieron los derechos más elementales. Encarnado en cierta forma en la Gestapo, el nazismo intentó conseguir, sin éxito, la destrucción del hombre tal como lo conocemos, pues el imperio nazi era el de la fuerza total, compuesto por amos y esclavos y sin respeto por el derecho la libertad. Y aunque ahora nos parezca una pesadilla de un tiempo pasado, los hombres no tienen derecho a olvidar tan deprisa. Nunca. En esta obra básica de la historiografía contemporánea, traducida a numerosos idiomas y ganador del Prix Litteráire de la Résistance y del Prix Aujouid´hui en 1963, Jacques Delarue desveló cómo el régimen nazi se impuso gracias a una compleja estructura policial.